El Banco Santa Fe quería comunicar una nueva línea de Préstamos pero tenía un problema, contaba con poco presupuesto para hacerlo. Con el ánimo un tanto caído, protestamos: “parece un chiste, un banco que presta dinero, no tiene dinero para anunciarlo…”, pero al instante nos dimos cuenta de que ahí había una idea: “que el banco se preste dinero para financiar su campaña de préstamos”. Fue una buena forma de demostrar que el producto es efectivo y confiable.